Paroquia de Nuestra Señora del Rosario de Torrejon

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EL “15”
Crónica de la Parroquia

Juan de Thoury, presbítero smm

1- Al equipo responsable de la redacción de este boletín le ha parecido interesante que no se pierda la memoria de lo que nos permite ser hoy lo que somos, la historia de nuestro pasado; y han recurrido a uno de los ancianos del lugar para contárnoslo. Lo haré, al filo de los recuerdos, sin hacer alarde, de profunda investigación histórica...

Empezaremos situándonos en la década de los años 60. Torrejón ha empezado a salir de su condición rural. A su industrialización naciente corresponde un crecimiento de población y surgen viviendas y barrios de una manera que no parece responder a un plan urbanístico de conjunto sino a necesidades puntuales o intereses diversos... El corazón del pueblo lo constituye la Plaza Mayor, con el ayuntamiento y la iglesia parroquial de San Juan evangelista., Es la única parroquia de Torrejón que cuenta también con dos ermitas: la de San Isidro (frente a la actual estación de autobuses) y la de Santa María Magdalena, al lado del Castillo. La vía del tren, con un tremendo paso a nivel, en la carretera de Loeches, cuyas barreras se quedan cerradas con frecuencia entre 10 Y 20 minutos, y la carretera general (actual Avenida de la Constitución) dividen el pueblo entre norte y sur de Torrejón. Todavía no existe la autovía N .II.
Rompiendo la monotonía de un gran descampado que se extendía del cementerio antiguo a la base americana, se instaló una fábrica de zapatos, "La Imperial", al lado de lo que, con el pasar de los años, llamaríamos "el puente de Risi". Dicho puente estrechito se construyó para dar paso, debajo de la vía, a los trabajadores de la fábrica, alojados en tres calles de casas bajas adosadas. Todavía hoy lo llamamos el "Barrio de Zapatería". Vista la distancia al centro del pueblo, se empezó a celebrar misa los domingos en un local escuela de aquel barrio, cl Cobre, como capilla aneja a la parroquia de San Juan evangelista.
También se habían construido dos calles, llamadas "del Duque", y "Magdalena", en el más alejado aún "Barrio del Castillo". Y ya que la ermita de Sta Magdalena había caído en ruinas, se celebraba misa en un piso del barrio que servía también de escuela.
El sur de la vía había conocido todo un desarrollo de viviendas con una fuerte densidad de población, constituyendo el "Barrio del Rosario" : el espacio comprendido entre la Ciudad Jardín del Rosario y la calle del Mármol. Debía nacer pues un nuevo anexo de San Juan, colocándose en la zona del local escolar de la calle Pelayo o del de la c/ Mármol (donde está hoy la biblioteca municipal).

En los años 69 y 70 la diócesis de Madrid tomó la decisión de crear en Torrejón dos parroquias: la Ermita de San Isidro pasaría a ser la "Parroquia de San Isidro", teniendo como núcleo principal de población el barrio de San José y parte de la c/ del Ferrocarril.
El sur de la vía del tren constituiría otra parroquia con sus tres barrios : el de Zapatería, el del Rosario y el del Castillo. El "templo" parroquial estaría ubicado en la calle del Mármol, n° 15.
Debido a la antigua ermita del barrio del Castillo, se llamó a la nueva parroquia "Santa María Magdalena". Pero la tradición torrejonera que venera a Nuestra Señora del Rosario como patrona, con su Hermandad y con el barrio que ya lleva su nombre, hizo que la diócesis decidiera cambiar el Titular de la nueva parroquia y le ponga "Nuestra Señora del Rosario", tal como lo refleja el Boletín Oficial de la Archidiócesis de Madrid (705/70).
Todavía hoy se puede leer este nombre, pintado de negro encima de la entrada a "Mármol, 15", y se adivinaba hasta hace poco por la forma de cruz de las rejas de las dos ventanas que este local tuvo una destinación religiosa.
El local de la calle Mármol tenía 110m2 y se dividió en un mini despacho y una pequeña sala de reunión separada por un tabique del templo propiamente dicho. El conjunto era pequeño y pobre, algo oscuro por ser un bajo sin grandes ventanas. No desentonaba mucho con el resto del barrio, de población obrera generalmente pobre, que iba pagando y arreglando su pisito a fuerza del mucho trabajo de todos los miembros de la familia (se entraba a trabajar como aprendiz generalmente al día siguiente de cumplir los 14 años).
El primer párroco, D. Antonio Cortés, dio el toque de sencillez al mobiliario de la iglesia, con un altar rústico de madera, un tronco cortado de 1m 50 como soporte al sagrario, un crucifijo destacado sobre un fondo de tela marrón en la pared, Y una imagen de la Virgen, joven madre sencilla como la de Nazaret, a la que se pasaría un rosario en el cuello como único adorno.
En respetuoso recuerdo a esos humildes comienzos de nuestra parroquia se debe el haber conservado en nuestro templo actual algunos objetos que remontan a los orígenes de la calle Mármol : el Cristo de la pared, la imagen de María, el sagrario, así como los soportes de madera de la pila bautismal y del cirio pascual.

En la Festividad de Todos los Santos, domingo día 1 de noviembre de 1970, se celebró en nuestra nueva parroquia el primer Bautismo, y seis días después, el día 7, la primera Boda.

( continuará...)